Descubren mecanismo que mejora la memoria y el aprendizaje
2012-03-055 mar (EFE).- Investigadores españoles han identificado un mecanismo molecular que, tras ser manipulado, aumentó la capacidad de aprender y retener información en ratas de laboratorio.
El estudio, llevado a cabo por investigadores del Centro de Biología Molecular Severo Ochoa (Madrid), acaba de ser publicado en PLoS Biology y destacado en Nature.
Las neuronas se comunican entre sí a través de la sinapsis, un complejo intercambio de información que lleva aparejado numerosos sucesos químicos y eléctricos. La sinapsis no siempre es igual, ya que algunas conexiones sinápticas sufren modificaciones como consecuencia de una actividad o experiencia previa vivida por las neuronas, un fenómeno conocido como “plasticidad sináptica” y considerado el sustrato celular del aprendizaje y la memoria del ser humano.
La investigación que ahora sale a la luz aporta nuevos datos sobre los mecanismos moleculares de este proceso y cómo pueden manipularse para facilitar la memoria.
En el estudio, los autores demuestran que las sinapsis pueden hacerse más plásticas usando un pequeño fragmento de una proteína (péptido) que está implicada en la comunicación celular. En concreto, este péptido (FGL, en su abreviatura) es capaz de inducir la incorporación de nuevos receptores de neurotransmisor en las sinapsis del hipocampo, zona del cerebro implicada en el aprendizaje y la memoria. Así, cuando los investigadores administraron FGL a ratas de laboratorio, observaron que su capacidad de aprender y retener información espacial aumentaba.
El investigador José A. Esteban, del centro Severo Ochoa, explica que “desde hace aproximadamente tres décadas se sabe que las conexiones sinápticas entre neuronas no son estáticas, sino que responden a la actividad neuronal modificando su intensidad”.
“Así -continúa-, estímulos del exterior pueden provocar que algunas sinapsis se potencien, mientras otras se debilitan; un código de bajadas y subidas de intensidad que permiten al cerebro almacenar información y formar memorias durante el aprendizaje”.
El trabajo revela, de este modo, que los mecanismos de plasticidad sináptica se pueden manipular farmacológicamente para aumentar la capacidad cognitiva, al menos en animales de laboratorio.
La también investigadora del Severo Ochoa, Shira Knafo, destaca que este tipo de estudios son una orientación sobre “posibles vías de intervención terapéutica para enfermedades mentales en las que estos mecanismos son defectuosos”.